Header AD

📌MI SUEGRA📌





Escucho que su amiga había ido a un cine porno pero nunca se imagino que asistiría a uno.


Mi suegra es la persona más temerosa del mundo, temerosa e ingenua. Cualquier cosa que ve o escucha se cree que es cierta. Todo lo malo que lea en internet es siempre cierto, lo que ve en la televisión, lo que escucha, o le dice la amiga de turno es palabra de Dios para ella. Por eso siempre vive en su particular fin del mundo. Su marido es otro mueble del salón. Desde que se jubiló hace unos años se pasa los días sentado frente a la tele viendo lo que sea, no se mueve más que para ir al baño o cuando se va de pesca, adora la pesca y la tele a partes iguales. Ambos se han convertido en el típico matrimonio de las películas de Ozores, antes no eran así. He visto fotos y oído relatos de cuando eran jóvenes, de los viajes que hacían cada año a cualquier sitio de la costa para pasar el verano, sus peregrinaciones religiosas por todo el mundo incluso escapadas románticas.En su juventud mi suegra era una buena potra, una cara bonita, tetas generosas, caderas anchas, culo abundante, una figura mucho mejor de la que lucen sus hijas en la actualidad. Ahora que se aproxima a los sesenta pues la figura se ha perdido un poco aunque las tetas y el culo generosos siguen ahí.

Hace unos meses, a principio de la primavera, mi teléfono sonó a primera hora de la mañana, yo a esa hora duermo ya que trabajo de noche y hasta mediodía no suelo levantarme. No le hice caso hasta que la llamada se repetía por tercera vez:

_ ¡Diga!

_ Cariño, soy Marta - Marta es mi esposa con la que llevo casado seis años - perdona que te despierte.

_ No pasa nada - le contesté más dormido que despierto.

_ Por favor, acercate a casa de mis padres. Mi madre me ha llamado al borde de un infarto por una tubería de agua rota o algo así.

_ ¿Y tu padre?

_ Se ha ido de pesca con Julio y no vuelve hasta la noche o sabe Dios cuando.

_ Me visto y voy para allá.

_ Genial. Una cosa Antonio, cuando llegues llamas a un fontanero y en cuanto esté solucionado te vuelves, no te pongas tu con tus arreglos -. Sonreí y colgué después de jurarle que haría como ella decía.

Mis suegros viven a una hora de nosotros, en una casita en la sierra. Cuando llegué a la casa ya estaba mi suegra en la puerta de la casa hablando por el móvil mientras gesticulaba con el brazo libre como una epiléptica.

_ ¡Hola Mati!

_ ¡ Hay Antonio que bueno que llegaste! - Me abrazó toda compungida mientras casi sollozando me contaba lo ocurrido. Sentí como sus tetas libres de sujetador se aplastaban contra mi pecho lo que puso aunque no lo desease, mis sentidos en alerta -... y cuando vi el agua en el salón ya me di cuenta que llegaría a algún enchufe, o a la nevera, a la televisión y nos ardería la casa.

_ Tranquila que ya verás como lo solucionamos.

Cuando entré a la casa vi que el agua había salido del baño  desplazándose por gran parte de la. Una de las tuberías que pasaban por donde estaba el mueble del lavabo se había agrietado por los cambios de temperatura con toda seguridad, y había terminado rompiendo. Mi suegra había cortado el agua en la llave de paso, así que decidí abrirla un poco para ver que grande era la rotura. El agua que salía a presión por la parte rota del tubo no era mucha, la rotura no parecía gran cosa, eso pensé yo, así que puedo solucionarlo sin que Marta sepa nada.

_ Mati, la rotura no parece gran cosa, creo que yo la puedo solucionar y así podrás tener agua en breve y te ahorras una pasta - la mujer volvió a abrazarme con fuerza aplastando sus enormes tetas de nuevo contra mi pecho y mis sentidos de nuevo en alerta - lo que pasa es que tendrás que ayudarme.

Cogimos las herramientas que tenía mi suegro en el garaje y con mis nociones de bricolaje casero comencé la reparación. Cuando corté la parte rota del tubo el agua que quedaba dentro salió con presión y me empapó la camiseta. Ya tenía el pantalón vaquero muy mojado pues había adsorbido gran parte del abundante agua que había en el suelo, lo había hecho cuando me arrodillé para poder trabajar dentro del estrecho mueble. 

_ Antonio hijo, quitate esa ropa empapada y te traigo algo de tu suegro.

_ Prefiero estar solo con el boxer por que seguro me vuelvo a mojar.

Le di a Matilde el pantalón y la camiseta empapados y seguí con mi faena. La cosa se me complicó cuando quería enroscar uno de los lados del tubo, ya que el otro me giraba y no conseguía que se quedara quieto. Yo acostado sobre mi espalda y mirando hacia arriba hacía todo lo posible por poner las roscas en su sitio, no podía.

_ Mati por favor echame una mano.

Los armarios de los lavabos de los baños son por norma bastante pequeños así que el sitio de trabajo era bastante reducido para poder caber mi suegra y yo. Aun así necesitaba su ayuda por lo que me moví lo posible para que al menos sus manos y su cabeza pudieran entrar. La mujer se arrodilló a mi lado y con bastante esfuerzo consiguió meter la mitad de su cuerpo en el estrecho cubículo. Cuando estiró sus brazos para sujetar el tubo que yo le indicaba sus tetas quedaron al descubierto casi por completo, el fino mandilón de cuadros que las tapaba se había corrido para atrás por el esfuerzo y aquellos pechos blancos como la nieve quedaron sobre mi cara.  Matilde miró de reojo donde se habían posado sus tetas y sus mejillas se pusieron rojas como un tomate al ver que ambas estaban en mi cara. Moví un poco mi cabeza para que mis ojos tuviesen suficiente campo de visión para trabajar pero lo único que conseguí fue que unos de aquellos gruesos pezones rosados quedase donde mi boca. Moví los labios en un gesto involuntario y medio pezón se deslizó por mis labios. Entonces me di cuenta, ya no era capaz de atender a los tubos estaba atendiendo a las tetas de mi suegra. Ella permanecía quieta, callada, atenta a que el tubo no se moviera como yo le había indicado mientras yo abría un poco más la boca hasta que todo el pezón derecho estaba dentro. Sin decir nada sujeté el otro pecho de Matilde con la mano en un acto disimulado como si intentara apartarlo, ahora tenía una de aquellas preciosas tetas en mi boca y la otra en la mano lo que hizo que mi polla se pusiese dura en un instante. !Y si¡...pensé.

_ Mira Mati, no puedo trabajar así no llego a los tubos. - La mandé salir a ella para luego seguirla yo, cuando me estaba levantando vi como ella guardaba sus tetas debajo de la tela del mandilón que a duras penas conseguían taparlas - mejor entra tu primero, te pones de rodillas como antes y me dejas un hueco para yo poder trabajar de cara.

Mi suegra ni se lo pensó, se arrodilló delante de mí quedándose a cuatro patas y metió la mitad de su cuerpo dentro del pequeño mueble. Como yo me había imaginado la tela del mandilón volvió a estirarse y su culo tapado por una bragas bastante diminutas quedó expuesto para mí. Puse mis manos sobre sus caderas y la empujé hacia un lado como si yo intentase entrar por el hueco que quedaba entre ella y el armario, yo sabía que era imposible entrar e imposible que yo arreglara aquello, pero debía disimular. Después de unos segundos de intentos fallidos pegué mi cabeza a la suya para que me oyese.

_ Mati, tengo que ponerme detrás de ti por que desde aquí no llego. Tu no sueltes el tubo sino se inunda más la casa y la cagamos.

_ No te preocupes que yo no suelto.- Dijo muy decidida.

Me puse detrás de ella y metí mis manos dentro del mueble como si quisiese apretar las roscas, poco a poco iba separando las piernas de Matilde con mis rodillas mientras mi polla se acercaba más y más a su culo en pompa. Me sorprendió ver hasta donde llegaba su ingenuidad ya que en ningún momento hizo gesto alguno de desaprobación, al contrario cuando entendió lo que yo hacía abrió sus piernas del todo para dejar que me acercase más. A unos centímetros de su culo miré para abajo y vi como unos pelos largos y negros desbordaban los laterales de su braga justo donde estaba el agujero de su coño, lo que hizo salir de mi pecho un bufido que ella interpretó como un esfuerzo.

_ Te está dando mucho trabajo Antonio, eres un sol.

No dije nada. Me acerqué hasta que el tronco de mi polla tocó su culo y sentí como un calambre de placer recorrió toda mi espalda. Jamás había deseado a mi suegra, ni lo había pensado pero desde que sus tetas se apretaron contra mí al verme y sobre todo en ese momento mataría por que mi polla entrase de un solo golpe en aquel culo en pompa que estaba ante mí. Dejé que  mi polla se liberase de la opresión de mi boxer ya con la mente nublada por el deseo y así poder rozar mi verga dura contra su culo. Ella tuvo que sentir como la punta de mi polla se deslizaba por su braguita recorriendo su culo y su coño en movimientos muy suaves, aun así no dijo nada, su cuerpo seguía inmóvil ante mí.

Cada minuto que pasaba mi valor iba en aumento a la par que mi deseo desenfrenado de follarla. En un apretón un poco más fuerte que los anteriores coloqué mi polla entre sus nalgas haciendo que las piernas se le abriesen de golpe mucho más, el empujón hizo que su cuerpo se moviese de manera brusca hacia adelante obligándola a apoyar sus manos en la pared. Me separé un poco y dejé que mi polla se colase entre la tela de sus bragas que yo había separado antes con un dedo, la punta de mi polla tocó los gruesos labios de su coño y Matilde suspiró. Aparte la tela hasta que el peludo coño quedó frente a mis ojos, los labios gordos y oscuros estaban mojados por los jugos de su coño, hasta la entrada de su ano estaba mojada. Comencé a deslizar mi polla entre los labios de su coño sabiendo que en cualquier momento entraría por el delicioso agujero de su vagina sin remedio. Me caía la baba por la comisura de los labios mientras sentía aquella cascada de placer, deseaba follármela sobre todo el culo que estaba casi seguro de que era virgen. Puse mis manos sobre sus caderas y comencé a mover mi polla desde la entrada de su ano hasta su coño y viceversa, así estuve un buen rato hasta que ya decidí que era el momento de que mi polla entrara en mi suegra. Puse la cabeza súper hinchada de mi dura verga en la entrada de su vagina y apreté suavemente, mi capullo comenzó a deslizarse dentro de su coño  mientras ella arqueaba la espalda . Ya está la mitad dentro, susurró mi cerebro a mis caderas para que empujaran con fuerza y metiesen la otra mitad de golpe para hacerla gemir. 

_ Mamá, Antonio ¿donde estáis? - la voz de mi cuñada entrando en la casa me despertó de aquel sueño... 

 RECIBE RELATOS NUEVOS TODOS LOS DÍAS EN TU TELÉFONO, SUSCRÍBETE A NUESTRO CANAL DE TELEGRAM 

📌MI SUEGRA📌 📌MI SUEGRA📌 Reviewed by xx on julio 13, 2022 Rating: 5

No hay comentarios.

DÉJANOS UN COMENTARIO, VALORA ESTE RELATO